Honramos la memoria del IVP Dan DiClemente, un veterano líder sindical del estado de Nueva York

 Los asistentes a la convención rindieron homenaje el miércoles al difunto Vicepresidente Internacional de AFSCME, Daniel DiClemente, fallecido en junio a los 56 años tras una larga batalla contra el cáncer.  
 
"Dan era todo lo que un líder de AFSCME debe ser. Inspiraba confianza y lealtad. Le apasionaba construir el poder y la solidaridad de los trabajadores. Y estaba profundamente arraigado en su ciudad natal de Rochester, Nueva York", afirmó Lee Saunders, presidente de AFSCME.  
 
DiClemente era "no sólo un gran sindicalista, sino una persona de decencia e integridad inquebrantables. Encarnaba lo mejor de nuestra unión: trabajador y orientado a la comunidad, comprometido con el servicio público y el activismo cívico. Fue mentor de innumerables personas. Se ganó el respeto tanto de aliados como de adversarios", añadió Saunders.  
 
El ex presidente del Concilio 66 de AFSCME se incorporó al movimiento obrero muy joven, cuando trabajaba como vidriero. Hizo huelga como miembro de una unión gremial de la construcción y luego trabajó como conserje en el distrito escolar de la ciudad de Rochester en 1992. 
 
DiClemente se convirtió rápidamente en un líder respetado y fue presidente de los Empleados No Docentes de la Junta de Educación (BENTE/AFSCME) Local 2419 durante 21 años. En ese tiempo, ayudó a sacar de la pobreza a muchos trabajadores de apoyo escolar para que pasaran a formar parte de la clase media. Su objetivo era garantizar un buen puesto de trabajo sindical a cada uno de sus compañeros de BENTE.  
 
En 2017, se convirtió en presidente del Concilio 66 y pasó a dirigir la unión de más de 8,000 miembros en todo el norte del estado de Nueva York y el valle del Hudson. Convirtió el Concilio 66 en una fuerza poderosa. En vísperas del intento del Tribunal Supremo de Estados Unidos de destripar las uniones de los servicios públicos en el caso Janus v. AFSCME Council 31, DiClemente animó a los miembros del Concilio 66 a organizarse para defender nuestros valores comunes. 
 
Incluso después de que le diagnosticaran un cáncer en fase cuatro en enero de 2020, siguió luchando por los trabajadores, garantizando la protección de los sindicalistas en el trabajo durante la pandemia de COVID-19. Y en sus últimos días, mantuvo conversaciones organizativas con profesionales de la salud desde su cama de hospital en Cleveland. 
 
Angelo Palmerini, actual presidente de BENTE, habló del legado de DiClemente. 
 
"Dan creía que, además de darle un salario digno, beneficios de atención médica y una pensión, la unión le daba un propósito, esperanza y comunidad", dijo Palmerini. "La valiente labor de Dan transformó la vida de miles de miembros de la comunidad, cambiando para siempre la vida de todos los que le conocieron". 
 
En una carta en la que anunciaba su jubilación a principios de año, DiClemente escribió que la unión "me ha dado propósito, esperanza y comunidad. No siempre ha sido fácil, pero siempre ha merecido la pena". 
 
A DiClemente le sobreviven su esposa Laura, sus hijas Stephanie y Katie, su padre Anthony y sus hermanos Anthony y Steven. Laura y Katie DiClemente estuvieron en la sala de la convención para escuchar los homenajes.